Desde el 28 de abril del presente año grandes grupos de la ciudadanía colombiana decidieron decir ¡Basta Ya!:
- 4 millones de personas sin empleo, de ellas el 60% son mujeres.
- 2 millones con empleos mal pagados y sin ninguna garantía de derechos: 62% de la población en el rebusque diario, la mayoría mujeres y jóvenes.
- 21 millones de personas en la pobreza.
- 33% de jóvenes no tienen oportunidades de trabajar ni estudiar.
- Enormes barreras para el acceso a la salud, a la educación, a la recreación y cultura.
- 75 mil personas muertas por COVID-19: en muchos casos debido a las precarias condiciones del sistema de salud. 70% de las personas muertas eran de los estratos 1 y 2, los más pobres de Colombia.
- 904 líderes sociales y 276 excombatientes de las FARC asesinados desde el 1 de diciembre de 2016.
- Acuerdos de paz hechos trizas por el gobierno de Uribe-Duque.
- Alto nivel de corrupción: según U.S. News, Colombia ocupó el primer lugar mundial de corrupción en el año 2020.
Frente a todo esto, algunos ejemplos de las utilidades de los más ricos:
- Los bancos han ganado $3 billones desde el inicio de la pandemia.
- Claro, reporta ingresos por $3,4 billones.
- Nutresa, empresa de alimentos, reporta ganancias por $576 mil millones.
- Celsia, empresa de energía, $339 mil millones.
- Colombina, $60 mil millones.
- Grupo Sura, $330 mil millones.
- En fin…
Y desde ese día millones de personas se han movilizado, especialmente hombres y mujeres jóvenes de todo el país: marchas pacíficas, actividades culturales, desfiles y caminatas, bloqueos, comunicaciones y conversatorios. Es una ciudadanía que abrió los ojos, estiró los brazos, se amarró los zapatos y salió a manifestarse.
Rompió el miedo. Unidos y unidas: estudiantes, campesinos, indígenas, comunidades afrocolombianas, mujeres, profesionales, docentes, obreros, empleadas, desempleados y desempleadas.
Más aún cuando el gobierno de Uribe-Duque quiere implementar su paquetazo para seguir beneficiando a los poderosos de siempre: reforma tributaria, reforma a la salud, reforma laboral, reforma pensional. Todo para los ricos. Nada para las clases medias y populares, los pequeños y medianos empresarios.
La ciudadanía se ha movilizado con fuerza, creatividad, dignidad y no violencia.
El gobierno ha respondido como sólo saben hacerlo los tiranos[1]:
- 708 casos de violencia policial.
- 312 intervenciones violentas por parte de la fuerza pública.
- 222 víctimas de violencia física por parte de la policía.
- 37 víctimas de violencia homicida por parte de la policía.
- 831 detenciones arbitrarias en contra de manifestantes.
- 22 víctimas de agresión en sus ojos.
- 10 mujeres víctimas de violencia sexual.
- 89 casos de personas desaparecidas forzosamente.
- 988 personas han sido detenidas, gran parte de ellas por medio de procedimientos arbitrarios.
Gobierno inepto, incapaz de dialogar con la población para definir medidas adecuadas a las necesidades de las comunidades. Gobierno traicionero que no cumple lo que promete. Gobierno violento: a las voces que reclaman paz, justicia, bienestar, les responde con tanquetas y metralla.
Dice la pancarta: “Nos han quitado todo, hasta el miedo”. ¡La lucha continúa! Las movilizaciones seguirán por toda Colombia, a pesar de la respuesta guerrerista del gobierno. La ciudadanía está decidida a seguir luchando por sus derechos. Indetenible.
Llamamos a la solidaridad de la comunidad internacional, a que esté atenta y difunda las verdades sobre lo que está pasando en Colombia; que incida ante sus gobiernos para que presionen al Estado colombiano a respetar el derecho a la protesta social; a proteger a los jóvenes y las jóvenes que se movilizan por sus derechos; a que se brinden reales garantías a las justas luchas de la ciudadanía.
Estamos a favor del paro nacional y sus justas reclamaciones, valoramos las diversas formas creativas y pacíficas expresadas por la juventud, las mujeres y comunidades populares. Exigimos al gobierno parar la violencia desatada contra los jóvenes y las jóvenes manifestantes, proteger su vida y sus derechos: Ese es su deber constitucional.
Expresamos nuestra voz de compañía y apoyo a todas las familias que han perdido a sus seres queridos durante el Paro, así como a quienes han sufrido heridas, detenciones, torturas: ¡Jamás les olvidaremos!
¡INVITAMOS A PROTEGER Y CUIDAR LA VIDA, A NUTRIR LA SOLIDARIDAD Y LA ESPERANZA, A LUCHAR CON AMOR Y FUERZA LIBERTARIA!
Cali, mayo 6 de 2021
[1] Según cifras de Temblores.org (28 de abril – 5 de mayo)